sábado, 3 de marzo de 2012

ESPAÑA. LOS PIRATAS SE QUEDAN CON TESOROS PERUANOS

España e Inglaterra fueron los más feroces piratas del pasado. Y tuvieron sangrientos enfrentamientos en los mares para robarse unos a los otros sus "botines" de guerra. El sábado 3 de marzo en TVE se puso en el aire un informe sobre al "recuperado tesoro del botin de monedas de oro y plata, además de lingotes de oro y de otros metales" que el barco de bandera española Nuestra Señora de las Mercedes y las Animas llevaba a bordo, gracias al "saqueo" de su comandante, don Diego de Alvear, proveniente del Perú. Para los españoles del noticiero de este 3 de marzo del 2012 de TVE  "traía un tesoro que le perteneció a la Corona Española porque entonces existía el Virreinato del Río de la Plata y Perú formaba parte de él". Ciertamente este oprobio llamado virreinato fue instituído por Carlos III entre 1776 y 1811 cuando desde la vieja aldea de Buenos Aires se llamó a la guerra por la libertad y los españoles empezaron a perder sus "colonias": Perú, junto a Bolivia, Paraguay, Chile, Argentina, Uruguay,  el sur del Brasil y las Islas Malvinas.
Que sepamos, el coloniaje de España terminó en el siglo XIX, aunque lo renovó desde los 90 del siglo XX a través de empresas en las que habría intereses de la Corona, como indican los conocedores aunque no hemos visto los papeles, claro está! Veamos, por parte, cómo fue el cuentito histórico:
Diego de Alvear venía con el botìn robado a los peruanos en el barco en cuestión hasta que se enfrento´a sus "hermanos" piratas ingleses frente al puerto de Cádiz, concretamente en la batalla del Cabo de Santa María, el 5 de octubre de 1804 y la nave se hundió, muriendo más de 200 personas, entre ellas, su esposa y siete de sus hijos. Uno quedó en Buenos Aires (Carlos de Alvear, patricio argentino, quien recibió 17 mil libras en indemnización de parte de los ingleses por la muerte de su familia en la batalla). Junto con los pasajeros, se hundió también el tesoro valuado hoy en 30 millones de dólares o bien en 17 toneladas, y si bien no tiene interés económico, tiene valor patrimonial para Sudamérica y, en especial, para los sí hermanos peruanos, dado que las monedas fueron acuñadas entonces en Lima.
España inició una disputa legal desde el 2007 contra la empresa Oddyssey, con base en Tampa, Florida (tierras robadas por España en otros siglos y vendida luego a los flamantes Estados Unidos de entonces). Y, como figuraba en los archivos los datos de la nave siniestrada y su botín, la empresa Oddyssey y la empresa británica que la apañaría en sus búsquedas de tesoros marinos ´perdieron el juicio.
Muy campantes, los españoles hablan de "un tesoro que es patrimonio de España" cuando en realidad es un vergonzoso robo de un patrimonio del Perú, en pleno siglo XXI, y en marzo del 2012. El espíritu de piratas no lo perdieron, se consideran dueños del mundo que alguna vez colonizaron para mal y a las pruebas de este vergonzante informe de la televisión española nos remitimos.
Investigando supimos que, en el 2008, las autoridades de museo y patrimonio del Perú se habían puesto en campaña para recuperar lo que les corresponde. Y ojalá que lo logren para empezar a ubicar a los europeos en el lugar donde tienen que estar, en sus tierras y con su arte, sin sus tentáculos sobre el mundo. España e Inglaterra son dos países codiciosos por naturaleza, no sus pueblos, confundidos por el accionar y decir de sus gobernantes, pero éstos, en manos de dos coronas milenarias, han dado muestras de ser inescrupulosas.
Así como los españoles hablaban de las "islas malvinas" como parte del virreinato del que formamos parte, queremos que nuestras islas vuelvan a ser nuestras y queremos que el botín de guerra que los españoles le robaron a los peruanos vuelva a manos del Perú. Fue indignante escuchar  que "ese patrimonio es español porque lo había conseguido nuestro comandante Diego de Alvear". Se les olvidó decir que fue "robado" de Lima, Perú. Seguimos siendo expoliados. Basta ya, España.
Apuntamos que, de la misma manera, los guías turísticos de Roma, ciudad bella y eterna, indican que los techos combados de las cuatro basílicas de esa ciudad lo están por el "peso del oro con el que están recubiertas, traído de Sudamérica, desde el imperio Inca".
Son países decadentes, enfermos por recuperar una gloria que jamás volverán a tener. Le llegó el turno a los que fuimos olvidados y expoliados por ellos. Europa hoy tiene el desastre que se merece por esclavizar a los países debajo del Ecuador.